Noticia Kompozzer
Un
cura italiano chantajeado por un menor con el que mantuvo relaciones sexuales
Un religioso de la ciudad italiana de Bolonia ha
denunciado a un joven que le estaba chantajeando a cambio de no difundir un
vídeo en el que ambos mantenían relaciones sexuales cuando el chico era menor
de edad.
El padre Giorgio Finotti, de 69 años, acudió a la
policía el pasado mes de febrero para denunciar al joven, de nacionalidad
rumana, y que en el momento en el que se grabó el vídeo tenía 17 años. Según la
investigación que ha llevado a cabo la policía, el menor –con el conocimiento
de su propio padre y la compañera sentimental de éste- le pidió 2.000
euros al cura para no difundir el vídeo que había sido grabado con el
teléfono móvil del chico. En el mes de febrero el joven se puso de nuevo en
contacto con el religioso y le exigió otros 500 euros a lo que Finotti se negó
y decidió acudir a la policía.
El joven, que hoy tiene 18 años, está
acusado de extorsión y será ingresado en una
comunidad de acogida. El padre y la compañera sentimental de éste están siendo
investigados por el mismo delito.
Según la reconstrucción de la policía, los hechos
se produjeron en una iglesia en el centro de Bolonia donde se llevaban a cabo
actividades de asistencia a menores, inmigrantes y familias con problemas
económicos.
En una entrevista al periódico La Republica de
Bolonia, el padre Finotti niega haber mantenido ningún tipo de relación sexual
con el joven y da su versión de los hechos. "El chico venía de vez en
cuando a la Iglesia a pedir limosna y yo cuando podía le daba unos euros. Un
día sus padres me dijeron que tenía que operarse a causa de un problema en sus
partes íntimas y necesitaba 2.000 euros", explica el cura.
"Pedí dinero entre mis feligreses para ayudarlos y se lo di al padre del
chico. Después me empezaron a pedir más y más porque decían que había hecho
algo malo a su hijo, y por eso me decidí a denunciar el caso ante la
policía".
El religioso asegura que durante estos meses ha
recibido amenazas telefónicas e incluso un día encontró una nota sobre
el altar exigiéndole el pago de 5.000 euros si no quería que el caso se hiciera
público. "El padre del chico –explica el cura- me enseñó un fotograma en
el que aparecía mi cara. Probablemente me filmaron a escondidas y después
hicieron un foto-montaje", asegura.
Según la investigación, no existiría ningún delito
de abusos sexuales puesto que las pruebas demuestran que las relaciones
fueron consentidas. En Italia la edad de consentimiento para mantener
relaciones sexuales está fijada en los 14 años que aumenta hasta los 16 en el
caso de que una de las personas ejerza un papel de autoridad sobre la otra, por
lo que en principio el cura no tendrá que asumir ninguna consecuencia legal,
aunque como ha declarado el Fiscal del Tribunal de Menores de Bolonia, Ugo
Pastore, "si bien es autor de un chantaje, la primera víctima es el
joven".
En una nota la Curia de Bolonia ha definido el caso
como "un suceso miserable" y pide a la justicia que "actúe con
rigor para esclarecer los hechos e imponer las sanciones oportunas".
Respecto al cura, añade la nota, "es un religioso y por tanto está sujeto
a la disciplina de la Congregación por lo que se tomarán medidas según las
normas canónicas". De momento, el padre Finotti será trasladado a
otra iglesia después del verano.